EL PASEO DE LOS DOMINGOS EN REP. DOM.Hoy en la mañana me recordaba de como se pasaba los Domingos durante mi infancia. No era una cosa de otro mundo pero disfrutaba de eso momentos. Y cuando esos recuerdos son de tu tierra lejanas todavia la nostalgia es mayor. Se hacia un recorrido desde mi casa en Las Colinas (una urbanizacion que queda en los suburbios de la ciudad de Santiago, Rep. Dom.) y todos, mis hermanos, mi mama y yo nos montabanos en una camonieta Mazda Blanca de mi padre y comenzaba la ruta. Mi mama iba alante junto a mi papa mientras que nosostros los muchachos estabamos en la parte de atras de la camioneta. Por lo regular la salida se hacia despues de las 4:00 PM cuando ya estabamos con la ropa de los Domingos. La ruta aunque era distinta debido que ruta mi papa usaba, siempre terminaba en los mismos sitios. Una de esa ruta era la de tomar la Avenida 27 de Febrero (Que antes se llamaba Avenida Central) desde la calle 41 (hoy Avenida Rafael Estevez), luego seguia toda la avenida hasta llegar a una pequeña calle que estaba antes de cruzar la esquina de la 27 de Febrero y la Avenida Bartolome Colon. Dicha calle cuyo nombre no se y ni lo recuerdo llega hasta la calle San Luis donde la camioneta hacia una derecha. En la misma calle San Luis se mantenia hasta llegar a la esquina de la misma con la calle Restauracion donde hacia una izquierda (Antes el sentido vial de esta calle era hacia el este, en la actualidad se transita hacia el oeste) y subia toda la calle Restauracion hasta doblar en unas de la calles mas empinadas de la ciudad la calle Dr R.Tolentino donde se subia. Imaginense habia que agarrarse bien para no caerse de la camioneta ya que la cuesta es muy empinada. Al final de la cuesta se dobla por la izquierda en la zona de las Tres cruzes que es una avenida corta con isletas en el medio que conecta en sentido oeste la calle Beller y la calle Peña Battle(eso creo que es el nombre) en sentido este. El monumento se ve imenso en esta zona. Todavia estabamos en la camioneta todavia y disfrutando de todo el ambiente urbano de la ciudad de Santiago. Saliendo de esa mini avenida se tomaba la avenida Francia, que en ese entonces era una calle angosta, hacia la izquierda y luego se tomaba el paseo de la calle del Sol que es un tramo de doble que comienza desde la esquina de la avenida Monumental hasta la esquina de la avenida Francia desde donde comienza la Calle del El Sol hacia el centro de la ciudad cuando el trafico era hacia el oeste en ese entonces (Hoy el flujo vehicular es en sentido este o seas se sube). Mientras se recorria la via yo miraba el monumento lleno de gente. Luego se dobla por la calle Daniel Espinal hacia la izquierda hasta llegar a la entrada del monumento y ahi empezaba el can. Todos en la camioneta subiamos y se daba una vuelta hasta bajar por donde subimos. Algunas veces nos parabamos a ver el ambiente y los paisajes impresionates que se miraba desde el monumento. Una vez salimos del monumento y retomamos la entrada de la calle del sol donde a pocos metros de la esquina de esta con la Avenida Francia, mi papa estacionaba la camioneta. Todos nos bajamos del vehiculo y entrabamos a la pizzeria La Antillana 2 (Hoy desaparecido) que se encontraba en la esquinas de la calle del Sol y Avenida Francia. Luego de sentarnos en una mesa se hacia el pedido y mientras venia el pedido mis padres se quedaban en la mesa mientras que Yo junto cn mis hermanos nos las pasabamos usando los columpios que tenia esta pizzeria. Despues de un rato de tanto usar los columpios nuestros padres nos llamaba para comer esas suculentas pizzas de jamon y queso que me gustaban tanto que decia no me llenaba comer una pizza sino con mucha pizzas. Pero como lo bueno no es mucho, me conformaba con los pedazos que me comia y para completar un vaso de refresco. Ya despues de comer, reposabamos por unos minutos y luego mis hermanos y yo regresamos a los columpios donde durabamos hasta que mis padres nos llamaran para irnos a la casa. Todos nos montabamos en la camioneta y comenzaba el recorrido hacia la casa. La ruta era bajar toda la calle del Sol hasta llegar a la calle 30 de Marzo hasta la avenida 27 de Febrero hasta la Calle 41 de las colinas y llegar hasta nuestra casa. Lo bueno de este trayecto hacia la casa era lo bien que se veia la ciudad de Santiago por la noche por lo que nunca se me borrara esa ruta para ir a la casa. Una vez llegado a la casa, cansados rumbo para la cama para levantarse trempano al dia siguiente que era Lunes para ir a la escuela. Con todo y eso me sentia bien, quizas el paseo no era una gran cosa pero de que yo lo disfrutaba lo disfrutaba. Esos son unos de los recuerdos buenos de mi infancia.